“Si bien me gustan mucho los chiquitos, me sentía mas cómoda con los alumnos de los últimos años de primaria”

Jorgelina contó que hizo sus estudios de magisterio en la ciudad de Bolívar y también había incursionado en Trabajo Social, pero luego de algunos años de estar haciendo esa carrera se dio cuenta que su vocación era la docencia. “Es algo muy significativo, empecé a dictar clases en la 22 y me jubilo en la 22” Dijo alegremente.

En la continuidad de su relato contó algunas de las experiencias que tuvo en las diferentes instituciones que tuvo lugar de conocer, tanto en el ámbito rural como en Pirovano y Urdampilleta. “En todas las comunidades la pase muy bien, no tengo mas que palabras de agradecimiento para todas y cada una de las familias que conocí” Reconoció con entusiasmo.

Asimismo, y haciendo una división entre el ámbito rural y el urbano, dijo que si bien existe una brecha de a poco se va achicando por el avance de la tecnología y el mundo en general. “Lo que mas se nota es la llegada de las familias a los colegios, si bien en el rural es mas asidua, hoy en día las urbanas, en localidades como la nuestra también son muy familiares” Remarcó Jorgelina.

La docente continuó agradeciendo el apoyo que recibió y pidió disculpas por los errores que se hubiesen podido cometer en estos años en que no solo enseño, sino que también aprendió. “El docente tiene la compleja tarea que los padres le ceden al momento de dejarlo en la institución” Remarcó en cuanto a la responsabilidad que su profesión conlleva.

En cuanto a sus compañeras de trabajo de estos últimos años, destacó el grupo que han conformado, la solidaridad de grupo y el gran compromiso con los valores y la vocación de servicio. “Me sorprendieron mucho durante el acto, y si algo tengo que agradecerle a la vida es que me pude retirar siendo feliz en mi puesto” Dijo con visible emoción en su voz.

Como cierre de la nota Jorgelina hizo una especie de reflexión acerca de la profesión que la vio desarrollarse y llegar a este punto y dejo un consejo a quienes deseen seguir por este camino que a ella tantas satisfacciones le ha dado. “Es una experiencia totalmente enriquecedora, trabajar con chicos te transporta a través de su inocencia y su luz”