Javier expresó de lo que le ha tocado vivir, ya que hace un mes atrás se acercó a su local personal policial a informarle que el Subcomisario había decidido que los talleres y demás locales debían tener todo en regla, con habilitación y todo. Faltándole a Javier la habilitación, por lo cual decidió iniciar los trámites que comenzó con el inicio del plano.

En su taller hace herrería, tornería, ubicándose en calle Italia y Lavalle.

Debido a esta situacion se comunicó con el Delegado Municipal comentándole todo lo sucedido, y se acercó a la delegación a solicitar todos los requisitos. Entonces el funcionario decidió comunicarse a la ciudad de Bolívar para averiguar su situación. Al día siguiente, le notificó que podía continuar trabajando, que no existiría clausura, pero debía continuar con los trámites.

El día 1 de junio alrededor de 15 horas, llegó el personal policial con el informe de infracción y la faja de clausura.

‘Prácticamente me echaron, pude sacar mi teléfono y el handee, me cerraron y no puedo entrar quedándome herramientas de clientes, lo más triste es no poder entrar en mi propiedad’ expresó Javier.

El joven debió salir a comunicarles a sus clientes lo sucedido y además él nunca se opuso a la orden.

"Es una decisión de la Policía de controlar los talleres"

‘Es mi único trabajo, yo vivo de eso, es mi sostén de vida, no tengo otra fuente de ingreso, lo hago con mucho amor porque es lo que sé hacer, siento impotencia de no poder estar en lo mío, que es mi galpón’ destacó.

El tiempo de poder tener todo en regla, depende de que le aprueben el plano, ya que fue enviado a donde corresponde y debe ser abalado, luego deberá presentarse en el Juzgado de Faltas para ver el acta.

"Es una situación desesperante porque necesito trabajar"

‘No sé qué voy hacer, seguiré esperando, haré lo que se pueda, trataré de armar afuera lo de mis clientes para que puedan llevarlo a otro lugar. Son herramientas que precisan, que me disculpen porque esto no es decisión mía, yo voy a tratar de salir rápido de esta situación y empezar de nuevo que es como se debe’ remarcó el joven trabajador.

‘En este caso me tocó a mí, pero puede haber más gente con mi misma situación, yo espero que se aclare o que nos den una solución, somos gente de trabajo gente de bien, no somos ningunos piratas, somos gente honesta todos nos conocen, pedimos seguir trabajando, quiero solución para todos y que estas cosas no pasen que traten de solucionarse, que hay que buscarle la vuelta, porque yo en mi caso soy solo, pero si detrás mío tuviera una familia seria desesperante’ concluyó Alvarez.